¿Qué está pasando con Player Unknown´s Battlegrounds?
Lo primero es lo primero. No he jugado ni un solo segundo al juego ni pienso hacerlo en breve. En lugar de eso me he leído cuatro párrafos y me he visto dos videos y medio, como de costumbre. By the face.
La cuestión es que un juego que estaba en Early Access, que vete tu a saber lo que es pero dista mucho de ser un juego acabado, se cuela en los premios de juego del año y genera su correspondiente debate.
No entro en debate por una simple razón. Es un buen juego. Y lo es por dos factores fundamentales que marcan un poquito el norte de lo que está pasando hoy en día con este mundillo. No todo está perdido.
Narrativa. Narrativa por aquí, narrativa por allá. Muchos nos devanamos los sesos en torno a la idea de la narrativa de los videojuegos, las mecánicas, la cuarta pared, la coherencia y la madre que la parió. PUBG coge una idea ancestral y la ponen en un mapa. La idea se llama MATAMATA. El último con vida gana. Con esto, la escasez de recursos y que el mapa se va achicando ya tenemos montada la narrativa de un videojuego como un demonio. Lo que a los juegos del hambre le costó tres libros gordos y cuatro películas a lo largo de 7 años éste juego lo ha logrado en 9 meses sin tener un producto acabado. Sin más.
Juego online multijugador. Adiós comunidades tóxicas. Adiós pay to win. Adios cajas de loot. Como pasó con Rocket League la gente se lo pasa bien y se divierte compitiendo. Se rien y disfrutan de buena tensión, bien dosificada y cuando uno cae se queda mirando al resto como se desenvuelve la partida. Mejor imposible.
Por todo esto, PUBG es mi mejor juego del año que no es un Zelda. 👻
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